Este mes quizás os traigo el consejo más importante que os puedo dar, o al menos el que más satisfacción y resultados inesperados me ha dado.
Siento deciros que estamos en este mundo por un tiempo limitado, creo que es algo de lo que no somos conscientes en muchos momentos del huracán de nuestras vidas, de esas cosas en las que reflexionas cuando algo va mal o alguien de tu entorno enferma.
La satisfacción de dejar un legado, que visto lo visto va a ser inmaterial, debe convertirse en una de nuestras prioridades en nuestra vida. Un legado basado en principios nobles, con ganas de cambiar con lo establecido, abriendo puertas que no sabías ni que existían y convertirte en un agente de cambio.
Desde nuestra humilde posición de músicos y de humanos, debemos encarar ese objetivo desde un mismo verbo: compartir.
Hay muchos que creen, desde su visión capitalista, que compartir es regalar, y no se dan cuenta de que es una de las inversiones más seguras que podemos hacer a largo plazo.
Hay mucha gente que con ese gesto tan solidario lleva felicidad a muchos rincones del planeta, completando su vida de esa manera o quién colaborando consigue un atajo para llegar a su meta mucho más rápidamente que el resto de sus egoístas compañeros de profesión.
Si algo debe entrenar el músico 2.0 es su capacidad de compartir, compartir tu trabajo con tu comunidad, colaborar en trabajos de otros artistas con tu misma filosofía, embarcarte en proyectos en los que se te pida que seas uno más con un remo (sabiendo que todos vais en una misma dirección y ganáis todos por igual), tocar en cualquier sitio donde seas requerido, cantar esa canción en la calle a esa fan que te para nerviosamente, firmar un disco o camiseta aunque en ese instante pudieras ser parte del reparto de The Walking Dead.
Esas pequeñas perlas, ese pequeño reguero de buenas acciones, como si de pulgarcito te disfrazases, va dejando un camino tras de ti del que no serás consciente hasta subir a la cima de los años y darte cuenta desde lo alto que tu legado, y su resultado, ha valido la pena.
Se solidario, comparte este artículo también, cambiemos lo establecido, cambia tu vida.
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